«Trabajo», por M. Romasco.

“Ama lo que haces y lo que haces te amará cien veces más “ Enric Corbera

Al hablar de trabajo desde la Bioneuroemoción debemos recordar que para nuestro inconsciente, trabajo es sinónimo de familia, no hace distinción, simbólicamente es: jefe (papá), jefa (mamá), compañeros ( hermanos) y para los jefes, sus empleados ( hijos). De esta manera, nuestro trabajo y nuestras actividades nos permiten conocernos.
Ya sabemos, que en todo momento nos estamos proyectando, nuestro interior se ve reflejado afuera, así que si arrastro problemas familiares, se verán reflejados al momento de interactuar en las actividades y los trabajos que realice.
Ejemplos: Conflictos con la autoridad (jefe, papá- jefa, mamá)
Juicios o celos con compañeros( hermanos)
Vivir el trabajo como una carga (familia)
Somos energía, información y vibración, todo lo que nos ocurre habla de nosotros mismos. Al desarrollar la conciencia de unidad y entender que todo está relacionado, podemos utilizar cada experiencia como aprendizaje y desarrollar, en cada actividad, nuestro potencial y nuestras capacidades.
La palabra trabajo proviene del latín Tripaliare y significa: torturar, tripalium: instrumento de tortura compuesto de tres maderos.
Aquí vemos que arquetípicamente, que es simbólicamente, como lo entiende nuestro inconsciente, el trabajo está asociado con el castigo y desde allí parten creencias como:
“Ganarás el pan con el sudor de tu frente “
“Sin sacrificio no se consigue nada”
Instalando así la relación con algo que nos produce sufrimiento, queja, agotamiento, etc….
Al conocer todo esto y aprenderlo para la vida , podemos elegir cómo abordar nuestras actividades, cómo relacionarnos en ellas y con la actitud que las llevaremos a cabo, aprovechando todos los aprendizajes que trae.
A través del trabajo puedo:
Desarrollar mi creatividad
Superar límites y miedos
Vincularme con los demás
Aumentar mis capacidades
Realizarme en la vida
Si comenzamos a poner esto en marcha, cada vez que realizamos una actividad prestaremos atención con la conciencia que lo estamos haciendo y así nos sentiremos adecuados siempre, no importa lo que nos toque hacer.
Si mi trabajo no me gusta: qué estoy proyectando?
Si no encuentro trabajo: cómo lo estoy buscando?
Si añoro cambiar de trabajo: cómo estoy dando hoy lo mejor en lo que hago?
No se trata de qué trabajo hagamos, se trata de hacer que para nosotros sea importante. Cada paso es una meta que forma parte del camino y si en cada paso damos todo lo mejor, el resto será su consecuencia.
Entonces, a partir de ahora, donde la vida nos ponga, demos siempre nuestro cien por cien, qué las oportunidades pueden surgir en cualquier momento.
Y si no sabes qué hacer o qué te gusta, ríndete a la experiencia, siempre estamos en donde debemos estar, confiá y no dejes de dar lo mejor a cada minuto.
Reflexiones
No se trata de hacer lo que te guste,hacé que te guste lo que hacés.
Lo que recibes en el camino, lo sembraste antes.
Creé en vos, no le dés poder al afuera.
Que todo lo que hagas, mejore la sociedad.
Acepta lo que te toque, es parte del camino.
Las dificultades, son pruebas de fé.
Se coherente siempre.

El universo sabe lo que querés, solo espera que a partir de hoy, des tu mejor versión.
Cada paso, siempre, es la meta.

Fuente: Enric Corbera: La felicidad en el trabajo

Mariana Romasco
Acompañante en Bioneuroemoción
Maestra de Reiky
Coaching Generativo y Estratégico
Practitioner en PNL
Consultas: 0291-154295892