«Qué síntoma estas eligiendo?», por M. Romasco.

“Antes de curar a alguien pregúntale si está dispuesto a renunciar a las cosas que lo enfermaron
Hipócrates

Cuando a la consulta llega un síntoma, da igual cual sea, comienzo preguntando para qué lo eligen y generalmente todos responden que nunca lo han elegido y que como van a querer estar enfermos!
Por más que cueste, es así, nuestro síntoma es el mensajero, es una respuesta, es la solución que nuestro cuerpo manifiesta como adaptación a un estrés prolongado en el tiempo, repetitivo y no gestionado en el momento oportuno. De allí la importancia de entender cómo funcionamos y así colaborar con nuestra emocionalidad y nuestra biología.
Estrés significa cambio, es una situación que nos pide adaptarnos a una realidad diferente, a una realidad nueva y la respuesta que demos a ello tendrá vital importancia en nuestra vida.
El estrés genera en nuestro cerebro la producción de distintos químicos para responder al estado de alerta, de alarma ante eventos conflictivos.Si hay un estrés en nuestra vida que decidimos prolongar, repetir y no abordar, se produce un colapso y nuestro cuerpo, nuestra biología, comienza a producir lo necesario para mantener el equilibrio a pesar del sobre- estrés al que lo estoy sometiendo y sostener la respuesta al alerta.
Esto provoca la aparición del síntoma en respuesta natural para compensar algo que entiendo que falta. A partir de aquí, depende de cual sea la emoción que impactó en cada persona, su percepción, su información familiar, sus creencias, etc… el tipo de síntoma que presente, su ubicación en el cuerpo y los órganos que afecta.
Un mismo síntoma, no tiene el mismo significado para todas las personas, es totalmente personal.
Simbólicamente cada parte del cuerpo y cada órgano tienen su síntoma asociado, aunque, el abordaje es individual y único para cada persona ya que responde a sus emociones, información personal y familiar. De allí que haya síntomas heredados de generación en generación.
Cuando se presenta un estrés, nuestra mente tiene incorporada una forma de reaccionar que está grabada en nuestro inconsciente, de allí que racionalmente podemos ver un efecto y sufrirlo (síntoma) e inclusive explicarlo, lo que no conocemos es la causa que lo provoca, que está impresa en nuestro inconsciente y es la que debemos ir a buscar, reimprimir y cambiar si deseamos contribuir con nuestra salud y con cualquier tratamiento que estemos realizando .
Gestionar nuestras emociones nos permite conocernos y entender nuestra conducta y nos acerca a una mejor calidad de vida.

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Mariana Romasco
Acompañante en Bioneuroemoción ®️
Certificada por Enric Corbera Institute
Consultas: 2914295892

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Redacción RN

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